Una de las actividades más divertidas que podemos realizar actualmente en equipo es el rafting. Es verdad que muchas personas desconocen este deporte de aventura, pero cuando lo practicas te das cuenta de que realmente es una gran opción para divertirte y disfrutar de la emoción de la naturaleza.

¿Qué es el rafting?

El rafting es un deporte que se centra en el descenso de un río de montaña. Este deporte se practica junto a otras personas, es decir, hablamos de un deporte en equipo o grupo. Para realizar el descenso siempre se usa un bote neumático, también llamado raft. Por supuesto, esa embarcación solo es empujada por la fuerte del agua y los remos, nunca lleva motor. Es decir, el agua mueve la embarcación y los aventureros los remos para llevar la balsa en la dirección adecuada.

Cuando no hemos practicado este deporte nunca podemos pensar que es arriesgado y peligroso, pero cuando lo practicamos nos damos cuenta de que no lo es tanto, sino que es muy divertido. En cierta manera podemos decir que es una actividad de aventura que engancha mucho.

Eso sí, para disfrutar al máximo es importante realizar el rafting con una empresa profesional que se encargue de todo. Para nosotros la mejor opción para hacer rafting es con la colaboración de los profesionales de https://www.ruting.es/. Cuentan con muchos años de experiencia y siempre nos harán realizar el recorrido que realmente se adapta a nuestras necesidades y conocimientos. Como todo en esta vida, es importante ir de menos a más para disfrutar y aprender sin problemas.

¿Cuáles son las principales modalidades de rafting?

Como nos comunican los expertos en rafting de Ruting, actualmente hay dos tipos de modalidades, las cuales van ligadas directamente al tipo de río sobre el cual se va a realizar el descenso.

Rio con gran caudal

Entran dentro de este grupo los ríos que se caracterizan por tener un gran caudal. Para realizar este descenso en la gran mayoría de ocasiones se suele usar un bote que tiene un cuadro central que ayuda a que el descenso sea un poco más fácil.

En este caso, los miembros del equipo tienen el objetivo de evitar caerse de la balsa, para lo cual tienen la obligación de agarrarse a las cuerdas laterales. El objetivo es sujetarse con fuerza para evitar caerse, lo que hace que la emoción esté asegurada.

En España es difícil encontrar este tipo de ríos. Para que te hagas a la idea, los ríos de gran caudal suelen estar presentes en países como África, Asia y América.

Río con poco caudal

Aunque pueda parecer mentira, en el caso de los ríos de menor caudal el riesgo y la dificultad suele ser más alta. Por ese motivo, lo que se busca es conseguir que cada uno de los miembros de la tripulación puedan tener una pala para poder remar a la vez en equipo. Para conseguir tener éxito en el descenso es importante que cada uno de los miembros siga las indicaciones del guía, el cual también tendrá una pala para llevar el ritmo.

Como el descenso no es fácil, es importante realizar diferentes maniobras. Actualmente por suerte en España hay muchos ríos por los que se puede disfrutar del rafting. Lo importante para disfrutar de una buena experiencia es importante realizar una ruta adecuada al nivel de cada persona.

Clasificación de ríos

Para disfrutar del descenso adecuado es importante saber qué clase de descenso vamos a realizar. Por ese motivo, te vamos a mostrar un listado con la clasificación internacional. Esas clases siempre van ligadas al nivel o grado de dificultad. Para que te hagas a la idea, la clasificación es la siguiente:

  • Clase 1: dentro de esta clase podemos incluir a los ríos de bajo nivel de agua. En este caso la corriente tipo poca presión y su navegación suele ser sencilla en la gran mayoría de ocasiones. Es un descenso perfecto para los principiantes que quieren comenzar a iniciarse en esta experiencia.
  • Clase 2: es el siguiente nivel a través del cual el deportista puede conseguir aprender y practicar las técnicas de rafting. El grado de dificultad es realmente bajo, lo que hace que no hagan falta muchos conocimientos para conseguir tener éxito.
  • Clase 3: es otra variedad de río que destaca por ser accesible a casi todo tipo de usuario. Se puede practicar sin experiencia previa, aunque se recomienda tener algún descenso con antelación para que el resultado sea más fácil. Se suele usar como método para dar el salto a ríos con aguas un poco más vivas.
  • Clase 4: dentro de esta categoría podemos ver como el río tiene más fuerza y eso ayuda a que el descenso sea más rápido. Incluso puede tener el potencial de dar la vuelta a la barca, lo que hace que sea más peligroso. Para realizar este descenso se recomienda que los deportistas ya tengan conocimientos y algo de entrenamiento para conseguir un buen resultado.
  • Clase 5: es un río más peligroso que el anterior, por lo que solo puede ser realizado el descenso por personas con experiencia. Para conseguir una buena experiencia es importante tener una buena resistencia y técnica. Es un descenso exigente y peligroso, es decir, es importante que la equipación de seguridad sea la adecuada para evitar accidentes.
  • Clase 6: es un tipo de río que destaca por tener un descenso muy caudaloso que suele ir acompañado por recorridos extremos. En este caso, la dificultad es la más alta, es decir, solo se recomienda realizar a las personas con mucha práctica dentro del rafting. Para obtener un buen resultado es importante contar con una buena técnica y sobre todo equipo. No hay que correr riesgos y por ese motivo la equipación es fundamental.

Para disfrutar del rafting al máximo se recomienda optar por realizar el recorrido con la clase adecuada al nivel. Siempre hay que ir de menos a más para tener la certeza de que el descenso será realmente bueno. No lo dudes, primero comienza disfrutando y luego poco a poco comienza a aumentar el nivel del descenso.