Cuando vamos a comprar un sofá, no tenemos que cometer el error de comprar el primero que nos gusta o vemos en la tienda. Siempre tenemos que meditar la compra para tener la certeza de que realmente estamos comprando el sofá que nos interesa.
Es importante que tengas claro que la compra de un sofá es una decisión que te va a afectar durante varios años de tu vida. Un sofá tiene una vida útil media de unos diez años. Si no quieres arrepentirte durante muchos años de haber realizado una compra que no te interesa, infórmate y compra el modelo que realmente te interesa.
¿El tapizado debe ser importante en la decisión de compra de un sofá?
Aunque pueda parecer mentira, el tapizado es una de las cosas que más debes valorar a la hora de comprar un sofá. Por ese motivo, desde ahora puedo asegurarte que un tapizado de un sofá de piel o de polipiel te dará buenos resultados.
Cuando hablamos de tapizado, pensamos que solo influye de manera directa en el diseño del sofá, pero influye en muchas otras cosas. Como nos comentan los expertos en sofás, el tapizado también influye de manera directa en la calidad y sobre todo en la vida útil del sofá. Y por si eso fuese poco, un tapizado también puede hacer que la sensación de calor o frescor sea mayor o menor. Por ese motivo, podemos concluir que elegir el tapizado adecuado es realmente importante.
¿La piel y la polipiel de un sofá son lo mismo?
La respuesta es no, aunque en ocasiones a simple vista pueden parecer lo mismo, realmente los diferentes tapizados cuentan con muchas diferencias. Si analizamos un sofá de piel auténtica, podemos darnos cuenta de que son modelos que destacan por tener un alto poder de resistencia.
A eso hay que añadir que los sofás de piel sintética no conservan bien la temperatura, independientemente de si es fría o calurosa. Eso se debe a que la piel no tiene efecto termorregulador. Con esto queremos decir que en verano tenemos sensación de más calor y en invierno de frío. A eso hay que añadir que la polipiel suele ser menos transpirable, lo cual puede reducir ligeramente la sensación de confort.
En cuanto al precio, sin lugar a dudas el sofá de piel es más caro que el sofá de polipiel. Por ese motivo, las personas que tienen un presupuesto ajustado suelen optar por la polipiel para ahorrar algo de dinero.
Finalmente podemos ver que la limpieza de la polipiel suele ser más fácil que la piel normal. Si vas a usar mucho el sofá, igual la opción de polipiel se adapta mejor a lo que buscas.
¿Qué es la polipiel sintética?
Para aprender a diferenciar entre piel y polipiel es necesario saber que es la polipiel.
Podemos definir piel sintética como un material que busca imitar la piel natural. A simple vista el sofá es idéntico, al igual que al tacto. No es fácil distinguir entre los dos materiales a no ser que dominemos sobre el tema.
La polipiel se elabora con materiales que son menos resistentes. Eso significa que la vida útil suele ser inferior a la de la piel. A cambio, su precio es más bajo. Con esto, podemos concluir que a pesar de no contar con las mismas prestaciones, la polipiel puede ser una gran alternativa.
¿Cómo puedo diferenciar un sofá de piel al de polipiel?
Diferenciar a simple vista los dos tipos de materiales no siempre es fácil. Por ese motivo te vamos a mostrar algunos aspectos en los que debes fijarte.
- Textura: cuando echas un vistazo a un sofá, es posible que no notes muchas diferencias visuales entre uno de piel y otro de polipiel. No obstante, al prestar atención a los detalles, podrás distinguir claramente entre ambos tipos. Los sofás de piel genuina exhiben una textura única con variaciones en los poros, mientras que los de polipiel tienen una textura uniforme sin cambios en los poros. Otra forma de comprobar el material es volteando el sofá y revisando los acabados en la parte posterior del tapizado.
- Tacto: cuando pasas la mano sobre una tapicería de piel natural notas que es suave y lisa. En cambio, la polipiel destaca por ser algo más rígida y con más arrugas. Además, los sofás de piel son más flexibles y ofrecen algo más de calidez. No siempre es fácil de detectarla, pero realmente existe esa diferencia.
- Termorregulación: los sofás de piel son transpirables, lo que quiere decir que son termorreguladores. Gracias a esa sensación en invierno no tenemos sensación de tanto frío y en verano de tanto calor. En cambio, los de polipiel no tienen esa termorregulación.
- Olor: la piel natural tiene su propio olor característico. Si la tapicería huele, podemos tener la certeza de que estamos ante piel. Si no huele, es porque es polipiel, la cual tiene un olor neutro. El olor será más intenso si el sofá es nuevo. Con el paso del tiempo poco a poco irá perdiendo ese olor.
- Precio: una de las grandes diferencias entre las dos opciones es el precio. Como puedes imaginar, el precio del sofá de piel es bastante más elevado que el precio del sofá de polipiel. La decisión de compra siempre irá vinculada a tu presupuesto.
¿Dónde puedo comprar un sofá de piel o de polipiel?
Cuando hayas decidido qué opción encaja mejor con lo que buscas, te recomiendo visitar el catálogo de sofás de https://www.sofaclub.es/sofas-piel.html. A través de la mejor web de sofás podrás encontrar sofás de piel y de polipiel de alta calidad a precios competitivos.
Como podrás comprobar, sus sofás destacan por ser muy bonitos porque cuentan con una tapicería bonita y de calidad. También destacan por tener precios competitivos y sobre todo una estructura de alta calidad. Los sofás se fabrican con materiales de alta calidad. Esa calidad no solo permite que la comodidad está asegurada, también ayuda a que la durabilidad sea superior.
Como hemos comentado, es importante apostar por un sofá de calidad para tener la certeza de que realmente vamos a disfrutar de una buena experiencia. Si tienes dudas, solo deberás preguntar a los expertos de Sofá Club y ellos te podrán asesorar sin compromiso. Así podrás tener la certeza de que realmente vas a adquirir el sofá que necesitas para tu casa.
