Con la colaboración de los expertos en adhesivos de Souldal Center vamos a mostrarte qué son y cuáles son los usos más comunes. Nuestro objetivo es que puedas resolver las dudas más comunes sobre los adhesivos y así puedas sacarles el máximo beneficio posible.

¿Qué son los adhesivos?

Podemos definir adhesivo como como un producto que tiene como objetivo unir dos materiales a través de una interacción química y física. A lo largo de la historia los adhesivos han ido evolucionando hasta lo que son hoy en día, pero lo que está claro es que el ser humano los lleva usando mucho tiempo para unir diferentes materiales. 

Su principal objetivo es crear una unión entre los dos materiales para evitar que se puedan separar. Dependiendo de la calidad del adhesivo, esa unión será de más o menos calidad y duración, por ese motivo, siempre hay que optar por adhesivos de calidad. 

Si buscas calidad, en https://soudalcenter.es/ podrás encontrar una amplia variedad de adhesivos entre los que elegir. Lo importante es optar por uno que encaja bien con los materiales sobre los cuales se va a trabajar. No todos pegan las mismas cosas, siempre hay que leer bien las indicaciones para elegir el producto que realmente se necesita. 

Tipos de adhesivos

En el mercado hay muchos tipos de adhesivos y de diferentes marcas. Nosotros con la ayuda de Soudal Center te mostramos los principales tipos. Si los conoces te será mucho más fácil elegir el producto que necesitas. 

  1. Adhesivos a base de resinas sintéticas 

Los adhesivos a base de resinas sintéticas son ampliamente utilizados en diversas industrias por su alta resistencia y durabilidad. Dentro de esta categoría, los adhesivos epoxi son de los más comunes. Estos están compuestos por resinas epoxi y endurecedores que, al mezclarse, generan una reacción química que crea un enlace muy fuerte. Son ideales para unir metales, plásticos, vidrio y madera, y se utilizan en la industria automotriz y de construcción.

Los adhesivos de poliuretano (PU) son otros importantes dentro de este grupo. Son conocidos por su flexibilidad y resistencia al agua, lo que los hace perfectos para aplicaciones exteriores y materiales que sufren movimientos. Se emplean en carpintería, construcción y en la fabricación de muebles.

Por otro lado, los adhesivos de cianoacrilato, más conocidos como superglue, destacan por su rápido curado y fuerte adherencia. Son especialmente útiles para pequeñas reparaciones domésticas y también tienen aplicaciones en la industria médica.

Cada uno de estos adhesivos tiene características específicas que los hacen adecuados para diferentes usos, ofreciendo soluciones fuertes y duraderas en diversas situaciones. La elección del tipo adecuado depende del material a unir y las condiciones a las que estará sometida la unión.

  1. Adhesivos a base de polímeros termoplásticos 

Los adhesivos a base de polímeros termoplásticos son materiales que se ablandan al calentarse y se endurecen al enfriarse, lo que los hace muy útiles en procesos industriales rápidos. Una de las principales características de estos adhesivos es su capacidad para cambiar de estado físico sin sufrir alteraciones químicas, lo que les permite ser reutilizados y reciclados en muchos casos.

Entre los adhesivos termoplásticos más conocidos están los adhesivos hot-melt. Estos se aplican en estado líquido tras calentarse y se solidifican rápidamente al enfriarse. Son ampliamente utilizados en industrias como la del embalaje, la fabricación de muebles y la electrónica, gracias a su rápido tiempo de curado y a que no requieren solventes. Sin embargo, no son recomendables para aplicaciones en entornos de altas temperaturas, ya que su resistencia térmica es limitada.

Los adhesivos acrílicos, otro tipo importante de adhesivos termoplásticos, se destacan por su resistencia a la intemperie, los rayos UV y productos químicos. Esto los hace ideales para aplicaciones al aire libre y en sectores como la construcción y la automoción. A diferencia de los hot-melt, los acrílicos pueden requerir catalizadores o temperaturas elevadas para su curado.

  1. Adhesivos a base de caucho

Se les conoce por su flexibilidad y capacidad para soportar movimientos o vibraciones, lo que los hace ideales para aplicaciones que requieren una unión duradera en condiciones dinámicas. Dentro de esta categoría, los adhesivos de caucho natural son algunos de los más antiguos, ofreciendo buenas propiedades de unión para materiales como cuero, textiles y madera, aunque su resistencia a la intemperie es limitada.

Por otro lado, los adhesivos de caucho sintético, como el neopreno, son altamente valorados por su resistencia a la humedad y al calor. Se utilizan comúnmente en la industria automotriz y en la fabricación de calzado, donde se necesita una buena adherencia en entornos exigentes. En general, los adhesivos a base de caucho son versátiles y ofrecen soluciones efectivas para una amplia gama de aplicaciones, aunque pueden tener limitaciones en cuanto a resistencia química a largo plazo.

  1. Adhesivos naturales

Son los que provienen de fuentes biológicas, como plantas y animales. Aunque los adhesivos sintéticos han ganado terreno en muchas áreas debido a su mayor resistencia y durabilidad, los naturales siguen siendo relevantes en aplicaciones específicas, gracias a su sostenibilidad y baja toxicidad, lo que los convierte en una opción preferida en ciertos sectores.

Los adhesivos de origen vegetal, como el almidón y la dextrina, se derivan de carbohidratos presentes en diversas plantas. Son especialmente utilizados en la industria del papel, el embalaje y la producción de etiquetas, debido a su bajo costo y carácter biodegradable. Estos adhesivos son ideales para unir materiales livianos y porosos, pero no ofrecen la misma resistencia que sus contrapartes sintéticas y no son adecuados para aplicaciones donde hay exposición a humedad o altas temperaturas.

Por otro lado, los adhesivos de origen animal incluyen la cola de caseína, derivada de la leche, y la gelatina, extraída del colágeno animal. Estos adhesivos se emplean en áreas como la carpintería, la fabricación de instrumentos musicales y la unión de textiles. Ofrecen buena adhesión en materiales porosos, pero son sensibles a la humedad, lo que limita su uso en condiciones ambientales exigentes.