Sin lugar a dudas uno de los mejores inventos que se han realizado en los últimos siglos para mejorar la calidad de vida de muchas personas han sido los audífonos. Gracias a los mismos las personas con discapacidad auditiva pueden escuchar mejor lo que pasa a su alrededor, es decir, es mucho más fácil que puedan disfrutar de una calidad de vida superior.
Como podemos ver en https://www.audioguia.info/, usar los audífonos es mucho más fácil de lo que parece. Solo hay que configurarlos a las necesidades de la persona que los va a usar y listo. Por otra parte, es importante mencionar que actualmente hay una amplia variedad de audífonos entre los que elegir. Esa variedad está ligada a que la tecnología ha evolucionado. Gracias a esa evolución podemos decir que los audífonos se adaptan mejor a las necesidades de cada persona, por lo que cada persona puede encontrar con facilidad el modelo que mejor encaja con sus necesidades.
Una vez comentado este detalle, vamos a dar paso a mostrarte las principales partes del audífono. No nos vamos a conformar con nombrarlas, sino que te vamos a explicar para qué sirve cada una de ellas. Así podrás conocer un poco más a fondo el funcionamiento de los audífonos para sordos.
1- Micrófono
Dependiendo del modelo, el audífono puede tener uno o dos micrófonos. Los mismos se usan principalmente para captar el sonido y posteriormente enviarlo a un amplificador para que acabe saliendo el sonido deseado a través del auricular.
No podemos decir dónde se localiza porque dependerá directamente del modelo y tipo de audífono del cual estemos hablando. Para que puedas hacerte a la idea, los audífonos BTE suelen tenerlos fuera del canal auditivo, concretamente detrás de la oreja. Pero como comentamos, cada modelo es diferente. Si quieres saber dónde tiene el tuyo el micro, solo deberás preguntar al especialista o buscar por internet el modelo. Así sabrás dónde se encuentra el micro o micros de tu modelo.
2- Procesador digital
El objetivo de esta parte del audífono es conseguir transformar las señales recogidas por el micrófono, las cuales son eléctricas en señales digitales para que el resto del audífono las pueda procesar correctamente. Con esa transformación también se busca conseguir hacer frente a las necesidades auditivas de cada persona.
A través del procesador digital no solo se pueden amplificar las frecuencias, también sirve para eliminar los ruidos de los sonidos exteriores y así conseguir que el sonido sea más claro. Como puedes imaginar, cuanto más claro sea el sonido, más fácil es comprender lo que se está hablando a nuestro alrededor.
3- Receptor
Es la parte que convierte las señales eléctricas en señales acústicas. En este caso, la señal las lleva a través del canal auditivo con el objetivo de que posteriormente el cerebro pueda procesar la información que está obteniendo.
Es una parte en la cual las señales son mejoradas con el objetivo de que el cerebro luego no tenga problemas a la hora de comprender la información que está recibiendo. Dependiendo del modelo, la situación del receptor puede estar en una parte u otra.
4- Tubo conector
Es un pequeño tubo de plástico que tiene como objetivo llevar el sonido amplificado al auricular receptor o molde.
Es una pieza bastante delicada, debido a que el plástico se puede desgastar o debilitar con el tiempo. Eso significa que con el paso del tiempo suele ser común tener que cambiar el tubo conector por uno nuevo para que la transmisión siga siendo la correcta. Dependiendo del modelo de audífono del cual hablemos, el tubo será de una manera u otra. Lo importante es que esté en buenas condiciones para certificar que manda la información correctamente.
5- Control de volumen
Como nos informan desde Audioguia es otra de las piezas importantes del audífono. Gracias a esta pieza se puede controlar con facilidad el volumen y así conseguir una experiencia adecuada al entorno.
Actualmente hay modelos que tienen control de volumen manual y otros automático. Dependiendo de lo que busques y el presupuesto que tengas para la compra, podrás optar por una u otra opción.
6- Auricular o molde
Es fácil reconocer esta pieza porque es la que se encuentra justo en nuestro canal auditivo. Eso significa que el auricular tiene el objetivo de lanzar el sonido a nuestro oído. Dependiendo del modelo, esta pieza puede ser de plástico o acrílica. De igual manera, la forma y el tamaño pueden variar según las necesidades de la persona que va a disfrutar del audífono.
7- Moldes a medida
Es otra de las piezas importantes de un audífono, sobre todo cuando se opta por un modelo personalizado.
Uno de los puntos fuertes de los moldes a medida es que los mismos ayudan a proporcionar estanqueidad acústica al acoplamiento entre el oído y el audífono. Así se consigue disfrutar de un confort superior.
A través de los moldes a medida se consigue conectar acústicamente el dispositivo con el oído. Así se consigue mandar la información que se quiere transmitir con mucha más facilidad y en consecuencia la comprensión es mucho más sencilla para la persona que los usa.
8- Compartimento para la batería
Es la parte en la cual se sitúa guardada la batería. No siempre se suele colocar en el mismo lugar, pero sí que podemos certificar que normalmente suele situarse en la zona de encendido y apagado del audífono.
Dependiendo del modelo elegido, en ese compartimento podemos encontrarnos una pila o la batería. Esta última deberá ser cargada para que el audífono nos siga ofreciendo los beneficios. Para que te hagas a la idea, normalmente suele ser necesario que la carga de las baterías se haga todas las noches, debido a que las mismas solo suelen ofrecer una autonomía de una jornada más o menos.
Para acabar, queremos dejar claro que actualmente hay diferentes tipos de audífonos entre los que podemos elegir según nuestras necesidades. Podemos optar por los BTE, Audífonos Intra, Recargables, Pediátricos y los RIC. Es importante tener claras la discapacidad auditiva que se sufre para poder elegir la opción que mejor encaja con nuestros intereses.