Existen muchas dolencias que pueden aparecer en nuestro cuerpo y que no llegamos a conocer en su totalidad. Esto ocurre, por ejemplo, a medida que vamos envejeciendo. Con el paso de los años nuestro cuerpo puede fallar de diferentes maneras, y debemos estar preparados para lo que nos puede deparar el destino.

No obstante, muchos males se pueden prevenir si se tiene un buen estilo de vida. Esto depende, claramente, de la forma en que nos alimentemos, la manera en que nos ejercitemos y la templanza mental con la que contemos. Lo anterior, ocasionará que nuestro cuerpo pueda luchar contra dichos males de manera efectiva.

Sin embargo, pueden aparecer males como la artritis que resultará muy difíciles de prevenir y con los cuales tendremos que convivir de la mejor manera. En el siguiente texto te hablaremos de todo lo que tienes que saber sobre dicho tema.

¿Qué es la artritis?

El término artritis significa, literalmente, inflamación de las articulaciones. De este mal, existen más de 100 tipos, contando enfermedades asociadas. Entre ellas se incluyen males que afectan a los huesos, músculos, articulaciones y el tejido que se encarga de sostenerlas.

Uno de los principales síntomas de la artritis es el dolor profundo y la rigidez en las partes afectadas. Esta enfermedad se puede presentar a cualquier edad y se sabe que es más común de lo que las personas creen. Cuando aparece, uno de los primeros síntomas es el dolor, hinchazón, rigidez y la dificultad para mover las articulaciones.

En caso de presentar una combinación de dichos síntomas, lo mejor que puedes hacer es acudir a tu médico lo más pronto posible. Este te hará una valoración profunda de lo que te ocurre y, en caso de tener la enfermedad, te dará cierto tipo de tratamientos.

Para la Arthritis Foundation es prioridad número uno el encontrar la cura, pues supone una de las principales causas de incapacidad. Mientras una cura llega, los diferentes estamentos contribuyen a la lucha donando recursos que pueden transformar la vida de las personas.

Diferencias entre artritis y artrosis

Se suele escuchar hablar de la artritis y la artrosis como dos enfermedades iguales, pero la verdad es que son muy distintas. Aunque ambas son enfermedades reumáticas que se presentan con intenso dolor, que puede afectar varias articulaciones y que son más frecuentes en las mujeres que en los hombres; la verdad es que su origen y el tratamiento de las mismas son muy diferentes.

En el caso de la artritis, es una inflamación que afecta la membrana sinovial. El líquido sinovial, que es el encargado de lubricar las articulaciones, se esparce por las articulaciones en vez de ser reabsorbido como es lo habitual. Esto ocasiona erosiones en los huesos y el cartílago.

La artrosis, por su parte, es un proceso degenerativo crónico que afecta al cartílago. Esto quiere decir, que la almohadilla que se encuentra entre los huesos de las articulaciones, la cual es la encargada que ellos no se rocen, se ve afectada. Con el tiempo, este cartílago desaparece, haciendo que exista un roce directamente entre los huesos, provocando un dolor intenso y la pérdida de la flexibilidad en todas las articulaciones afectadas.

En el caso de la artritis las causas pueden ser muy diferentes. En ocasiones se debe a infecciones ocasionadas por un germen que se aloja en las articulaciones, por traumatismos, enfermedades autoinmunes o por depósitos de cristales que se acumulan en la membrana sinovial.

La artrosis, por otro lado, se asocia a los procesos de envejecimiento que todos sufrimos naturalmente. Se presenta, en la mayoría de casos, después de los 40 años. Algunos factores como la obesidad o el sobreesfuerzo en las articulaciones, típico en deportistas de élite, son los que desencadenan este mal.

¿Qué es la osteoporosis?

La osteoporosis es una enfermedad ósea que produce una disminución de la densidad de masa ósea. Esto quiere decir que los huesos se vuelven más porosos, existe un aumento en el número y el tamaño de las cavidades que se encuentran en el interior de las mismas, lo que los hace más frágiles, menos resistentes a los golpes y que se rompan con mucha facilidad.

Una de las causas de esta enfermedad es una vida de numerosos cambios metabólicos. Puede ser que la persona pase por diferentes fases de desnutrición y formación de huesos. Dichas fases se regulan por distintas hormonas, actividad física, dieta y vitaminas. Normalmente, una persona alcanza su máximo óseo a la edad de 30 o 35 años, esto quiere decir que en ese momento se encuentra en su pico de masa ósea.

A partir de este momento, ocurre una pérdida natural de masa ósea. Las mujeres suelen sufrir en mayor medida de esta enfermedad, ello se debe a que su pico de masa ósea suele ser mucho menor que en los varones y la menopausia es un factor de aceleramiento cuando hablamos de pérdida de hueso.

Una de las características principales de la osteoporosis es que se presente sin síntomas hasta que el paciente sufre una pérdida ósea considerable, por esto se le conoce como la epidemia silenciosa. Algunas de las fracturas más comunes cuando se tiene la enfermedad son las vertebrales, las de cadera y las de muñeca. Se debe tener especial cuidado con las fracturas en la cadera, sobre todo porque al sufrir de ellas se debe acudir al quirófano, lo que supone una gran pérdida en la calidad de vida del paciente.

Diferencias entre artritis, artrosis y osteoporosis

Aunque en lo superficial pueden parecer enfermedades, como ya hemos visto son muy diferentes y afectan de manera diferente al cuerpo humano. La artritis afecta al líquido que lubrica los huesos, la artrosis al cartílago y la osteoporosis al hueso mismo. Las tres son dolencias supremamente complejas y que merecen toda la atención en caso de sufrirlas.

Lo más importante es que busques un especialista en el tema, este te dará todas lo necesario para que puedas combatir y tener una vida tranquila y sin complicaciones.

Diferencia entre fiebre reumática y artritis reumatoide

La fiebre reumática es una inflamación que provoca daño severo en el corazón e insuficiencia cardiaca al que la padece. Suele presentarse en niños de 5 a 15 años de edad. Los síntomas son inflamaciones en las articulaciones, corazón, piel y el sistema nervioso central lo que puede desencadenar infecciones en la garganta como la faringitis y la amigdalitis o una fiebre escarlata si no se trata adecuadamente.

En el caso de la artritis reumatoide se puede presentar con fuertes dolores, inflamación y la incapacidad para utilizar las articulaciones, se puede presentar en cualquier articulación del cuerpo, pero sobre todo afecta las muñecas y los dedos. Es más frecuente en mujeres que en hombres y se comienza a evidenciar después de pasada la mediana edad. En algunos casos las personas padecen por corto tiempo la enfermedad y luego desaparece, aunque algunos pueden convivir con ella toda la vida.