¿Te estás aficionando al póker y te gustaría conocer todas las modalidades que existen? A continuación te presentamos las principales diferencias entre los distintos tipos de póker que puedes practicar. Sigue leyendo para valorar las características principales de los distintos tipos de póker y cuáles son las diferencias más notables a tener en cuenta a la hora de jugar y seleccionar una u otra modalidad, según los expertos.

El 5 Card Draw Poker

En primer lugar encontramos el 5 Card Draw Poker, la primera modalidad de póker con la que suelen empezar los jugadores de póker principiantes para después poder pasar a jugar de manera más profesional y eficiente al popular Texas Holdem póker.

El 5 Card Draw es un tipo de póker en el que se reparten a cada jugador cinco cartas diferentes para posteriormente realizar una ronda de apuestas. A continuación se realiza un descarte y después de este tiene lugar una segunda ronda de apuestas, que también será la última en esta modalidad de póker.

En el 5 Card Draw, si se llega al “showdown” y son varios los jugadores que han conseguido llegar a esta etapa final en la última de las rondas de apuestas, el jugador que ganará la mano será el que tenga la jugada más alta con sus cinco cartas propias. A este póker se le denomina también “póker clásico”, porque es el más tradicional de todos los tipos de póker que existen, y el más popular antes de la llegada de Texas Hold’em.

El Texas Hold’em Poker

Entre los tipos de póker más conocidos y populares del mundo encontramos el Texas Hold’em. El que podemos encontrar en la mayoría de casinos online y del que existen más torneos en todo el planeta. Es el tipo de póker más extendido y jugado a nivel mundial, tal y como nos han contado los expertos en póker de PokertimeClub, a los que hemos consultado para elaborar este artículo y dónde es posible encontrar los mejores clubes de póker seguros y totalmente profesionales para jugar al póker online sin riesgos. En el Texas Hold’em Poker cada uno de los jugadores recibirá dos cartas propias y después se colocan cinco cartas comunes en la mesa.

Los jugadores pueden utilizar las cinco cartas comunes y sus dos cartas propias para poder crear la mejor jugada en cada mano. En el Texas Holdem se juegan cuatro rondas de apuestas: preflop, usando únicamente las cartas propias, flop, con tres cartas comunes de la mesa, turn, con cuatro cartas comunes de la mesa y river, con cinco cartas comunes de la mesa.

Cada año se juegan multitud de eventos y torneos muy populares con el Texas Hold’em como protagonista, como por ejemplos las WSOP, en las que los profesionales pueden llegar a ganar premios de millones de dólares, siendo este el tipo de póker más profesionalizado del mundo.

El 5 Card Stud

Por otro lado encontramos el 5 Card Stud, un tipo de póker bastante menos conocido alrededor del mundo y que apenas tiene adeptos en España, pero que es muy popular en Estados Unidos y destaca por sus peculiaridades.

En el 5 Card Stud solamente una de las cartas propias de los jugadores se reparte boca abajo, siendo el resto de cartas visibles, lo que, lógicamente, se traduce en mucha información para el resto de jugadores de póker.

Así, antes de empezar con la primera ronda de apuestas se repartirán dos cartas a cada uno de los jugadores: una de las cartas cubierta y la otra carta descubierta. Entonces tiene lugar una ronda de apuestas y después se entrega otra carta descubierta a todos los participantes. Se continúa procediendo de la misma forma hasta terminar con el reparto de cinco cartas a cada jugador, siendo cuatro las rondas de apuestas en total.

El Omaha

A continuación encontramos el póker Omaha. Se trata de una versión avanzada del denominado Texas Hold’em Póker y también de uno de los tipos de póker más complicados y novedosos que existen para poder jugar online. En algunos lugares es más popular que el Texas Hold’em, aunque requiere bastante experiencia para poder jugar bien, si bien el número de jugadores profesionales que practican esta modalidad es más bajo, con lo que con algunos conocimientos y mucha práctica es más sencillo convertirse en una referencia en este tipo de póker, ya que no existe tanta competencia.

En el Omaha se reparten cuatro cartas propias tapadas a cada uno de los jugadores, produciéndose en total cuatro rondas de apuestas que serán preflop, flop, turn y river. Cada uno de los jugadores podrá utilizar únicamente dos de sus cartas propias para crear sus propias jugadas, así como tres de las cartas comunes.

El 7 Card Stud

Otro de los tipos de póker más complicados de dominar es el 7 card stud. Es un tipo de póker bastante complicado y que requiere de mucha práctica, dedicación y entrenamiento. Es parecido al 5 Card Stud, aunque en este caso las cartas repartidas a cada uno de los participantes del juego son siete y no cinco.

De esta manera, para jugar al 7 Card Stud se reparten tres cartas a cada jugador en el reparto inicial. Dos cartas serán tapadas y una descubierta. Después de la ronda de apuestas se reparte otra carta más descubierta a cada uno de los jugadores.

A continuación se produce una nueva ronda de apuestas y se repite el mismo procedimiento con la quinta y con la sexta carta, que también se dan descubiertas, dando lugar cada una de ellas a una nueva ronda de apuestas.

En el póker 7 card stud el River o la última carta siempre será cubierta y después de ella se produce la última ronda de apuestas, con lo que se trata de un tipo de póker bastante complicado de dominar al principio.

El póker caribeño

Por otro lado, revisando las principales diferencias entre los diferentes tipos de póker que existen debemos tener en cuenta que el póker caribeño es un tipo de póker muy diferente a los demás. El póker caribeño tiene un funcionamiento distinto porque en esta modalidad no se compite contra otros jugadores, sino que es un tipo de póker en el que se compite contra la casa o el casino, siendo por tanto este póker un juego propio de los casinos.

De esta manera, básicamente es una modalidad de póker en la que el crupier y los jugadores juegan cara a cara, a nivel individual. Los participantes para conseguir ganar tienen que conseguir una jugada que sea superior a la del crupier, que representará a la casa o al casino.

En el póker caribeño se reparten cinco cartas al jugador y cinco cartas al crupier. Una de estas cartas se coloca boca arriba para poder dar esta ventaja al jugador, quien además encontrará la posibilidad de poder comprar un descarte o cambio de carta en algunos casinos.

Cada uno de los jugadores debe decidir si va o si pasa. Si el crupier no tiene jugada la mano no se jugará. En estos casos el casino tendrá que pagar a los participantes las apuestas iniciales. A continuación se mostrarán las cartas y se entregará a cada uno de los jugadores ganadores el premio que les corresponda según cuál sea el valor de su jugada.

El strip póker

Si hablamos de una modalidad de poker distendida y pensada para la diversión y el entretenimiento encontramos el strip poker. Sin duda es un póker poco serio e ideal para grupos de amigos que solo quieren pasarlo bien. Al strip póker no se juega con puntos ni fichas, n siquiera con dinero. Al strip póker nos jugamos el mostrarnos ante el resto de jugadores con más o con menos ropa. Es una buena alternativa para poner algo de emoción a una noche de fiesta.

Para jugar al strip póker se puede elegir cualquiera de las modalidades de póker entre jugadores anteriormente mencionadas, ya que esta será la base para el juego, siendo la diferencia principal el “pago con ropa” por las manos perdidas.

El video póker

Finalmente encontramos el video póker. Según los expertos, se trata de un juego especialmente popular y propio de los casinos online, aunque también es posible encontrar el video póker de manera presencial en las máquinas de algunos casinos físicos o clásicos. En el video póker los jugadores reciben cinco cartas y disponen además de un descarte para poder conseguir la mejor jugada posible.

De esta manera, si se consigue una mano mínima, que suele ser una pareja de jotas en la mayoría de casos, el jugador recibirá un premio dependiendo de cuanto valga su mano, que irá aumentando hasta el premio máximo: la escalera de color. Es un tipo de póker realmente peculiar porque no se compite contra otros oponentes o jugadores, pero tampoco contra el casino o la casa, sino que se debe buscar obtener el máximo valor posible para conseguir los mejores premios.