El avance en los tratamientos capilares ha influido positivamente en el bienestar emocional de las personas que sufren alopecia.

Un injerto o implante capilar constituye una técnica que permite repoblar con pelo aquellas zonas en las que se ha producido la pérdida parcial o intensa del cabello. Se trata del único medio por el cual es posible recuperar la masa capilar.

La técnica del implante capilar consta de varios métodos de trasplante, destacando por encima de otros, como el FUSS, los métodos FUE y DHI. El primero de ellos es, a día de hoy, el más empleado en injertos capilares, mientras que, el segundo, es el más utilizado para repoblar zonas concretas y determinadas del cuero cabelludo.

Si te has decidido por someterte a un injerto capilar, seguramente te surjan muchas cuestiones acerca de los procedimientos de estas dos técnicas. Por ello, te contamos todo lo que necesitas saber en torno a técnicas FUE y DHI, así como las diferencias entre ellas.

Qué es la técnica FUE

La técnica FUE es uno de los métodos más populares de trasplante de pelo.

Toma su nombre de sus siglas en inglés (Follicular Unit Extraction) y se trata de una técnica mínimamente invasiva, basada en la extracción directa del área donante de los folículos de pelo vivo uno a uno. Posteriormente se injertan en la zona deseada.

Esta técnica produce una mínima hipopigmentación, es decir, un color más claro de lo normal en el sitio de extracción de los folículos y menos dolor durante el postoperatorio, lo que justifica que, la técnica FUE, sea cada vez más escogida por los pacientes.

Durante la intervención, se anestesia la zona donante, es decir, el área de donde se extraerán los folículos, se realiza la incisión en el cuero cabelludo y se extraen las unidades foliculares una a una.

Para la implantación en la zona receptora, se introducen los injertos del mismo modo, es decir, uno a uno. A fin de que quede totalmente integrado, se sigue el diseño, la densidad y la dirección natural de cada zona.

Qué es la técnica DHI

La técnica DHI se corresponde con un novedoso método de implante capilar con el que obtener resultados visibles y naturales.

Este método consiste en la implantación de los folículos uno a uno directamente en el área del trasplante, una forma de actuar que permite que, los injertos, permanezcan menos tiempo fuera del cuero cabelludo.

¿Cómo se consigue? Gracias al uso de un instrumento denominado Implanter, que permite injertar las unidades foliculares, extraídas de la zona donante, en la zona receptora al mismo tiempo que se realiza la incisión.

Esta manera de intervenir permite que, el cabello implantado, sea más saludable y fuerte. Además, otro de sus puntos a favor, es que, en el momento de realizar el injerto, las incisiones que se han de realizar son menores.

Tanto una como otra técnica requiere de un equipo médico dotado de una gran habilidad, fruto de la experiencia. El equipo médico presente en la intervención, junto a los técnicos, ha de estar perfectamente cualificado para llevar a cabo las diferentes técnicas de implante capilar.

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Diferencia entre FUE y DHI

Una vez hemos comprendido en qué consiste cada una de las técnicas, cabe preguntarnos en qué se diferencian.

Si bien es cierto que comparten similitudes como, por ejemplo, el proceso de extracción de los folículos uno a uno, la técnica DHI es, realmente, una variante de la FUE. La principal diferencia entre ambas la encontramos en el método de implantación de los folículos en la zona receptora.

Pero, además de ello, podemos citar otras diferencias que determinan, en buena medida, su elección por parte de los pacientes.

En primer lugar, tenemos el factor del sangrado. La técnica DHI, dado que no precisa hacer agujeros de incisión, produce menor sangrado en comparación con la técnica FUE. Además, los pacientes que se someten a la técnica DHI no precisan raparse la cabeza, como sí requiere la técnica FUE.

Otra diferencia que encontramos entre ambas técnicas es que, mientras que la técnica FUE es un método que se emplea tanto para extraer los folículos como para injertarlos, la técnica DHI solo hace referencia al injerto propiamente dicho.

Por otro lado, el tiempo que transcurre entre la extracción de los folículos y su implantación en la zona receptora es inmediato en el caso de la técnica DHI. En el caso del método FUE, los folículos extraídos pasan a una zona de cultivo, donde se esterilizan, se conservan y se descartan aquellos que no son válidos.

Así, mientras que en la técnica DHI, la implantación se produce de manera simultánea a la incisión, gracias al mencionado instrumento Implanter, en la técnica FUE, mientras que los folículos se encuentran en la zona de cultivo, se prepara la zona receptora del paciente realizando pequeñas incisiones en el cuero cabelludo con una aguja esterilizada.

Por último, la cantidad de folículos pilosos que pueden implantarse en la técnica DHI se limita a 3.000, lo que explica que sea una técnica empleada para repoblar zonas localizadas. Por su parte, la técnica FUE carece de límite de folículos, por lo que se puede aplicar sobre áreas más amplias en las que se sufre alopecia.

¿Hay más métodos de implante capilar?

Además de las técnicas que hemos abordado en el artículo, existen otras técnicas de implante de cabello entre las que destaca el método FUSS o FUT.

El método FUT

Esta técnica de implante capilar, también conocida como técnica de tira o método FUSS, consiste en extraer una tira de cuero cabelludo del paciente, por lo general, de la zona posterior de la cabeza, de la que se extraen las unidades foliculares.

Para ello, se administra anestesia local para adormecer la zona donante y extraer la tira del cuero cabelludo. Una vez que se ha retirado, se sutura la zona y el pelo que la rodea cubre y oculta la zona suturada.

La tira que se ha extraído, es separada mediante un bisturí en pedazos más pequeños. El tamaño es tan minúsculo, que, de hecho, se puede llegar a dividir la tira en 2.000 fragmentos que constituyen los injertos.

De la tira, se extraen todos los injertos que son preparados individualmente para ser trasplantados a la zona deseada. Para la implantación de los folículos en el cuero cabelludo, se realizan agujeros de punción en el cuero cabelludo de manera muy precisa, atendiendo a la ubicación, el ángulo y la profundidad de cada unidad folicular para garantizar un acabado natural.

Se trata de un método permanente de restaurar el aspecto natural de tu cabello que, aunque es más agresiva que otras técnicas, la mayoría de los pacientes regresan a su rutina normal al día siguiente de la intervención.