En ocasiones se puede llegar a confundir el significado de las palabras actitud y aptitud porque ambas se refieren a capacidades de las personas para relacionarse con su entorno. Sin embargo, ambas abordan aspectos muy diferentes del comportamiento humano.

En el entorno laboral, se tiende a valorar la actitud de las personas ante diversas situaciones que se pueden presentar en el desempeño de sus funciones. Igualmente, se evalúa si la persona cuenta con las aptitudes que se requieren para un puesto de trabajo en particular.

Cuando un posible empleador busca a alguien idóneo para ocupar un puesto en su empresa, trata de determinar si el candidato tiene la actitud y las aptitudes necesarias. Es decir, se busca un equilibrio entre la capacidad de enfrentarse adecuadamente a situaciones de presión junto a las capacidades cognitivas necesarias para desarrollar una actividad particular.

¿Qué es la actitud?

Este es un término que ha sido definido de diversas formas por los psicólogos, pero que se puede entender como la forma que tiene una persona de responder ante una situación dada. Este comportamiento es aprendido y adquirido durante la vida y está condicionado al contexto social de cada persona.

La actitud de una persona puede cambiar con base a sus experiencias de vida y la influencia del contexto social donde se encuentra.

Las actitudes tienen tres componentes que van a determinar la forma de cada persona de responder ante una situación dada. Estos son:

  • Componente emocional: está referido a los sentimientos o estados de ánimo que expresa cada persona ante un hecho concreto.
  • Componente cognitivo: tiene relación con las opiniones y creencias del individuo así como la información que tiene sobre una situación particular.
  • Componente conductual: se refiere a la forma de expresar las emociones u opiniones de la persona con relación a un hecho particular.

Las actitudes pueden ser de diferentes tipos asociadas a la valoración afectiva, motivacional o el manejo de las emociones. Así cuando hacemos una valoración afectiva, se puede tener una actitud negativa o positiva ante una situación particular.

Las actitudes proactivas llevan a tratar de resolver los problemas de una forma autónoma y creativa mientras que las reactivas evitan buscar una solución al enfrentarse a un problema dado.

De esta manera, una actitud dada ante una situación va a determinar una respuesta particular en cada individuo. Por ejemplo, ante una situación de presión una persona puede tener una actitud negativa asociada a sus conocimientos o emociones mientras que otra puede enfrentarlo con una actitud positiva.

¿Qué es la aptitud?

Esto se refiere a la capacidad y conocimientos que tiene una persona para desarrollar una actividad en concreto. En un contexto psicológico se considera que la aptitud es la capacidad de un individuo de vincular sus habilidades con el aprendizaje de nuevos conocimientos y aplicarlos en una realidad concreta.

Por ejemplo, si una persona que tiene destrezas en el área de la electrónica recibe formación técnica, luego es capaz de combinar estas destrezas con el conocimiento para resolver un problema concreto en ese campo.

En el campo laboral, se interpreta que tener aptitud es contar con las capacidades necesarias para desempeñar una tarea determinada. Entre algunas aptitudes laborales se encuentran la responsabilidad, creatividad y capacidad de trabajar en grupo.

Las aptitudes son innatas de las personas, pero se pueden mejorar mediante el aprendizaje. Entre otras tenemos:

Aptitud física

Destreza de un individuo para realizar distintas actividades físicas manteniendo un buen rendimiento. Esta es una aptitud común en la mayoría de los deportistas, los cuales la pueden mejorar mediante un entrenamiento riguroso.

Aptitud verbal

Capacidad de una persona de comprender y analizar textos y oraciones así como relacionarlos entre sí. Esta es una destreza innata de las personas dedicadas a la enseñanza y la escritura, que pueden mejorar con el aprendizaje de diferentes técnicas de comprensión lectora.

Aptitud numérica

Es la destreza que tiene un individuo de manejar los números y realizar operaciones matemáticas. Los matemáticos, físicos o ingenieros tienen esta aptitud innata que van desarrollando en su proceso de aprendizaje.

Diferencias entre actitud y aptitud

La actitud está referida a la forma de pensar y sentir de una persona ante un hecho o situación particular. Por su parte, la aptitud es la habilidad de un individuo para desarrollar una actividad concreta.

La actitud viene determinada por las experiencias y contexto social que rodean al individuo y puede cambiar por influencia del medio en que se desarrolla. Las aptitudes son innatas de la persona y pueden mejorarse mediante el aprendizaje de técnicas o adquisición de nuevos conocimientos.

Por ejemplo, una persona puede tener aptitudes para emprender un negocio debido a su capacidad para planificar y organizar. Sin embargo, si tiene una actitud negativa y reactiva no será capaz de abordar con éxito esta actividad.

Diferencias entre personalidad y actitud

Desde el punto de vista psicológico la personalidad se entiende como el conjunto de características que definen a un individuo. Esto incluye su manera de pensar, sentimientos, patrones de conducta, opiniones, valores y actitudes que lo hacen diferente de las demás personas.

Por su parte, la actitud se refiere a la forma que responde una persona a una situación y que está definida por sus experiencias. En este sentido, la actitud de un individuo ante distintas situaciones puede cambiar mientras que su personalidad se mantiene igual.

Por ejemplo, una persona puede tener una actitud negativa ante la homosexualidad, pero si tiene una experiencia particular o un conocimiento más profundo del tema su actitud puede volverse positiva. Sin embargo, es poco probable que las vivencias hagan que una persona introvertida y con un fuerte sentido del deber cambie su personalidad para volverse extrovertida y despreocupada.

Diferencias entre aptitud y habilidad

Se ha definido una habilidad como la capacidad de realizar una tarea correctamente y con facilidad. Por su parte, la aptitud es la capacidad innata que tiene una persona en un campo determinado, como por ejemplo, en la música o las matemáticas.

Las aptitudes se tienden a manifestar desde la niñez y evidencian el potencial que tiene la persona para desarrollar una actividad dada. Así, un individuo con aptitud para la música podría aprender a tocar un instrumento sin necesidad de recibir una formación profesional.

Las habilidades están referidas al saber hacer algo y se van adquiriendo mediante un proceso de aprendizaje. Por ejemplo, una persona puede aprender a colocar una instalación eléctrica al recibir una formación técnica aunque no tenga una aptitud natural para hacerlo.