¿Estás buscando una mampara perfecta para tu cuarto de baño? Entonces es posible que te hayas dado cuenta de que existen opciones variadas elaboradas con diferentes materiales. A continuación te presentamos las principales diferencias entre las mamparas de aluminio y las mamparas de acero inoxidable que deberías tener en cuenta para poder escoger la opción perfecta. Sigue leyendo para conocer las diferencias básicas entre las mamparas de aluminio y las de acero inoxidable.

Mamparas de aluminio vs mamparas de acero inoxidable

Las mamparas de acero inoxidable no es que lleven un revestimiento especial sino que se fabrican de manera especial con elementos previamente seleccionados. De esta manera, las mamparas de acero inoxidable están elaboradas a partir de aleaciones de hierro, de carbono níquel, de cromo y de molibdeno. Así, mezclados en las proporciones adecuadas, estos elementos permiten conseguir materiales altamente resistentes a la corrosión que destacan por tener un aspecto exterior brillante que los diferencia de otros metales. Es por este motivo que, gracias a su atractivo estético y a su resistencia a la oxidación, el acero inoxidable se usa en muchos sectores diferentes, incluido el de las mamparas de ducha.

De esta forma, según los expertos es uno de los materiales de referencia en los baños actuales en los que es muy importante cuidar la funcionalidad, pero también la estética y la durabilidad. Si te interesan las mamparas elaboradas con este tipo de material tan duradero, puedes encontrar más información en https://asealia.com/es/3-mamparas-de-ducha, dónde son expertos en mamparas de ducha actuales modernas y eficientes. De esta forma, la mejor manera de entender los motivos por los que el acero inoxidable es una alternativa más eficiente para la elaboración de las mamparas que el aluminio es realizando un repaso a los puntos que diferencian ambas opciones.

Si bien a primera vista parecen materiales parecidos, lo cierto es que el aluminio y el acero inoxidable son diferentes en sus características esenciales. De hecho, el aluminio es mucho más ligero, pero el acero inoxidable para las mamparas resulta mucho más resistente. Del mismo modo, según para que fin vayamos a utilizarlo, una u otra calidad puede ser más interesante.

En cuanto a la estética, el acero inoxidable siempre es una opción más atractiva para las mamparas. Mientras que el aluminio es más opaco, el acero inoxidable es brillante y atractivo, mucho más reluciente. A nivel de durabilidad, lo mejor son las mamparas de acero inoxidable, ya que se trata del material más utilizado en todo tipo de superficies pensadas para soportar grandes pesos, como por ejemplo las cocinas profesionales, o usos intensos, como sucede con las mamparas de ducha. Si bien es cierto que existen tratamientos especiales para prevenir la corrosión, el aluminio es mucho más susceptible a ésta que el acero inoxidable.

Por si todas estas diferencias no fueran pocas, las mamparas de acero inoxidable también son más resistentes a la humedad y a los cambios de temperatura, ya que este tipo de acero no es poroso y presenta una defensa invisible ante este tipo de agentes externos que se ubican en la base de fabricación de la mampara. A nivel de precios, las mamparas de acero inoxidable son algo más caras que las de aluminio, pero sin duda esta diferencia vale la pena si tenemos en cuenta la durabilidad y la resistencia de los diferentes tipos de mamparas.

Del mismo modo, aunque se trata de materiales versátiles en ambos casos, estas características hacen de las mamparas de acero inoxidable una alternativa más atractiva para la mayoría de usuarios que se están planteando adquirir una mampara de baño. Asimismo, entre la principales ventajas de las mamparas de acero inoxidable encontramos que son especialmente resistentes en espacios tan delicados como el cuarto de baño, en los que sin duda la seguridad es prioritaria, siendo la mejor alternativa para evitar cualquier tipo de accidente. Del mismo modo, las mamparas de aluminio y de acero inoxidable se pueden adaptar a diferentes formas de apertura, consiguiendo que de esta forma sea mucho más sencillo el aprovechar el espacio del cuarto de baño.

Se trata también de mamparas que cuentan con una perfilería especialmente resistente a la corrosión, lo cuál es fundamental en un lugar como el cuarto de baño, dónde las mamparas están sometidas de manera constante a los efectos de la humedad y del agua. Así, las mamparas de acero inoxidable permiten preparar una imagen especialmente elegante con diseños modernos y acabados finos, brillantes y originales, que son muy atractivos a nivel estético. De esta manera, si quieres invertir en calidad y en eficiencia, sin duda las mamparas de acero inoxidable van un paso por delante de las mamparas de aluminio.

Se trata también de una opción mucho más novedosa que te ayudará a cambiar la cara de tu cuarto de baño o a decorar a la perfección con un elemento especialmente práctico tu cuarto de baño de obra nueva. Finalmente, cabe reseñar que en la actualidad es posible encontrar muchas más alternativas de mamparas de acero inoxidable que de mamparas de aluminio disponibles en el mercado.